Un coreano pensó que era mucho problema esperar y estrelló hasta tres veces su silla de ruedas para pasar al ascensor, sólo para toparse que el aquél ya había subido, cayendo de fea forma por el cubo hacia el triunfo en los premios Darwin en la edición 2010.
El video de su trágica pero risible muerte es el que tenemos arriba en esta entrada y venció en cerrada pugna al caso de sendo par de calenturientos brasileños (perdón por el pleonasmo) quienes se pararon a la vera de la carretera que va de Sao Paulo a Rio (ya ven que casi nadie la ha de usar) en un día de densa niebla -Ay gostossa garotinha naiden nos vai a vistar en este oscurusumento- pos pa darle gusto al gusto, con lo que lograron ambos terminar segundos en la carrera por el premio tras arrollados por un camión materialista.
La doctora Wendy Northcutt hizo el anuncio y felicitó a todos los finalistas por haber hecho a la humanidad un poquito mejor.
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