Habíamos celebrado en febrero que uno de los nuestros hubiera sido ascendido por sus méritos. Ahora celebramos que un gatuno, que ha patrullado las peligrosas calles de la ciudad de Shapigba, ha recibido el reconocimiento de sus compañeros humanos y el tratamiento de efectivo del cuerpo de policía y, por ende, de par.
Uno de sus compañeros dice de él.
"Es muy tranquilo, trepa árboles, caza ratas, es bárbaro. Estamos criando al gato y dándole el título de oficial porque se ve bien y hace un gran trabajo en la captura de ratas".
Si captura ratas, obviamente merece ser policía.
Desde esta redacción mandamos nuestro beneplácito por tal acierto de la Jefatura y nuestra felicitación al susodicho minino.
Conozca al terror del hampa.
